familia Bueno cuenllas
Benervino y Erundina tuvieron 8 hijos, entre ellos estaba Mino, ganadero y caminero.
Abilio Minervino Bueno Cuenllas ( Mino ), nació en Lago de Babia. Era hijo de Benervino Bueno Almarza y de Erundina Cuenllas Maceda padres de 8 hijos: Ismael, Elvira, Isidoro, Mino, Fermín, Elena, Amelia y Henar Bueno Cuenllas.
Toda la vida de Mino transcurrió en Lago de Babia. Sin más medio de locomoción que una bicicleta.
Fue Ganadero, también trabajo de caminero en la construcción de la carretera a la Cueta de Babia.
Pico y pala
tirando del carro
La casa de los Bueno Cuenllas estaba repartida entre mineros y las labores de ganadería propias de la zona de Lago de Babia.
Su padre Benervino y sus hermanos Isidoro y Fermín además trabajaban en la mina. Iban a la localidad de Carrasconte todos los días andando o en bicicleta.
Mino dedicaba su vida al cuidado de los animales de la casa. Había vacas, ovejas, cabras, cerdos, caballería, gallinas, perros y gatos. Todos ellos tenían un trabajo en común: todos los días, por la mañana al empezar el día y al anochecer, se les daba de comer o se preparaban para que saliesen al campo, y luego recogerlos por la noche.
Las vacas Mino las empleaba como fuerza de tiro para hacer las tareas del campo. Las subía al carro que tenían en la casa y con ellas recogía la hierba, sacaba el abono que generaban para abonar las fincas etc. También aprovechaba de ellas la producción láctea y los terneros.
CUANDO JUNIO LLEGA,
BUSCA LA HOZ Y SIEGA
La yerba era la denominación que se hacia para la recolección del heno, para el alimento del ganado durante el invierno, en los meses que no podían salir a pastar al campo.
Se hacia en el mes de julio, cuando el calor empezaba hacer su aparición y así era posible el secado para poder recogerla siendo posible su conservación. Solían aparecer segadores que venían a ganarse el jornal de Asturias, a los cuales se les contrataba para hacer la siega.
Si quieres conocer más detalles de las labores que se realizaban en Babia te dejamos la investigación realizada por Ángel Manuel García sobre el cuidado de los animales y la siega.
Se empezaba segando los prados que eran de secano, ya que la hierba maduraba primero, para dejar los últimos los de regadío. Todo tenía su punto de maduración. Antes de empezar se preparaban los aperos, la guadaña, los forcones, los rastros, el carro con las perniechas (pernillas), la soga y los pajares. Los pajares eran donde se almacenaba la hierba, teniendo solo una salida, hacia la cuadra y sobre los 2.50 de altura, tenia una ventana llamada el postigo que era por donde se metía la hierba y la paja.
Normalmente el suelo era de tierra y para que no se pudriese la hierba en contacto con la humedad de la tierra, se rellenaba el suelo con una capa del arbusto de escobas (retama). Para ello se iba al campo en el mes de mayo o junio y se arrancaban varias las suficientes para cubrir todo el suelo. Esto se llamaba mullido.
Si quieres conocer más detalles de las labores que se realizaban en Babia te dejamos la investigación realizada por Ángel Manuel García sobre el cuidado de los animales y la siega.